Hay un caballo en el cobertizo del granjero;
Si el Gitano está hambriento,
Hay una gallina cerca de la pared del granjero;
Si los Gitanos tienen sed,
Hay cerveza para todos;
Y si la mano del Gitano está vacía,
¡Hay georgios por todas partes!
-Canción tradicional gitana
Los Gitanos ven las posesiones y los objetos materiales de una forma muy diferente a la gente de la mayoría de las otras culturas modernas. Los Gitanos saben que la pobreza verdadera aparece al aferrarse demasiado a las posesiones y la riqueza. Es muy fácil convertirse en esclavo de las posesiones, como se ha visto por doquier, desde los enormes gastos que se hacen en sistemas de alarma y vigilantes, hasta el asesinato fortuito de niños por sus zapatillas. "¿Por qué posesión vale la pena morir?", preguntarán los Gitanos.
Para los Rom, el mayor tesoro de todos es la libertad. Los Gitanos disfrutan obteniendo riquezas, pero cuando un Gitano es rico, no tiene tanto apego a sus posesiones como para no arriesgarlas todas por algún capricho. Puede que simplemente las abandone cuando se conviertan en una carga, más que en un placer. Después de todo, si necesita otra fortuna, está seguro de obtenerla en breve. Los Gitanos ven las posesiones simplemente como instrumentos para aumentar su felicidad, comodidad y libertad, pero estos instrumentos no son importantes en sí mismos. La importancia se la dan a las cosas intangibles de la vida: la emoción, la familia y la libertad.
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