El Sabio Maestro Kong

El Confucianismo se parece más a un sistema social y político que a una religión organizada per se. Sin embargo, lleva siendo practicado en el Reino Medio por más de 2.500 años. La mitología de este sistema nos habla de que, en un momento no especificado entre finales del siglo VI y principios del V a.C., vivió un hombre llamado Kǒng Fūzǐ, o Maestro Kong (la palabra "Confucio" es la versión latinizada de su nombre, adaptado por los misioneros europeos que fueron a China).

Era un devoto del aprendizaje y, especialmente, apreciaba los Cinco Libros Canónicos: Libro de la Historia (Shu-Ching), el Libro de las Odas (Shi-Ching), Las Cumbres y Reglas para los Sacrificios y Ceremonias (Li-chi), el Libro de los Cambios (I Ching) y los Anales de la Primavera y el Otoño en el estado de Lu (Ch'un-ch'iu). Mantenía una posición como especialista gubernamental y de ceremonias familiares en su estado nativo de Lu (actualmente conocido como Shantung), una provincia oriental de China. El periodo temporal en el que vivió es llamado actualmente como de "Los Reinos Combatientes" y es razonable que lleve ese apodo: Confucio fue testigo de las tribulaciones causadas por la guerra y su disgusto comenzó a crecer junto con la sociedad discordante, la ignorancia de los deberes y el desprecio por las ceremonias que previamente habían mantenido cohesionado a su país.

Debido a esto, el Maestro Kong hizo lo que mucho ya habían hecho en su propio mundo discordante: volvió su mirada al pasado en busca de un modelo social ideal. Lo encontró en las historias de la Edad de las Leyendas, en los sabios reinos de los legendarios guerreros-sabios, Shun y Yao, y en el liderazgo del Duque de Chou, el supuesto fundador de Lu. Colocó a los guerreros-sabios y al Duque como arquetipos para su sistema y, estudiando sus historias, demostró que las virtudes de un gobernante debían corresponderse con los valores de cada una de las materias que debían cultivar; incluyendo la compasión para con los otros, la lealtad y perseverancia al servir a los superiores de uno y un sentimiento general respecto a lo que se considera moralmente correcto.

Este sistema de valores acompaña a otro sistema llamado "li" ("decoro") que está basado en las ceremonias de los ancianos y es propuesto para ser una versión en miniatura de la trama perfecta por la que se atrae el favor del Cielo. Bosqueja ceremonias para todo el mundo, dependiendo del género, edad, posición social y contexto. El Maestro Kong creía que esas ceremonias tenían un efecto disciplinario sobre aquellos que lo practicaban: el li, razonaba él, ponía freno a la depravación, influyendo en la gente para que, día a día, se inclinase por la buena conducta manteniéndose lejos de los malos actos.