Las Masas

Edit
No todos los vampiros de la Camarilla tienen un título; ni mucho menos. La gran mayoría de los miembros de la secta se encargan de sus propios asuntos. Algunos tienen ambiciones para alcanzar poder dentro de la secta. Estos vampiros prestan mucha atención a los asuntos políticos y pueden pasar décadas o incluso siglos planeando su ascenso al poder. Otros evitan el tema por completo, presentándose a cada príncipe cuando es pertinente, y refugiándose posteriormente en las alcantarillas o los laboratorios taumatúrgicos. La realidad es que cada vampiro tiene toda una eternidad por delante, y que haría bien en encontrar algo que hacer antes de que el aburrimiento aplastante de los años le vuelva loco. La participación activa en la política es una opción sólo para algunos Vástagos; no hay demasiados cargos a los que aspirar, después de todo, y el ascenso es un proceso lento y sangriento. Eso significa que los Vástagos necesitan encontrar otros intereses y desahogos, mientras observan las Tradiciones y preservan la Mascarada. La diversión más habitual para los Vástagos tiene que ver con los mortales.

Esta relación puede adoptar diferentes formas, desde dedicarse a las artes (los grupos musicales de vampiros son sorprendentemente comunes) a manipular corporaciones. Otros Vástagos tratan de reanudar o iniciar sus vidas mortales, habitando entre los mortales tratando de ocultar sus objetivos o evitar el aburrimiento. Con más frecuencia, no obstante, un vampiro que decide pasar sus noches entrometiéndose en las vidas mortales escoge un campo o institución particular, a menudo por orden del príncipe, que no tiene ningún interés en que sus súbditos se disputen un negocio especialmente jugoso y después se pone a jugar con su nuevo juguete. Los Vástagos se vuelven protectores de sus contactos mortales, atendiéndoles con el mismo cuidado y pasión que emplea un jardinero en un apreciado bonsái. A menudo no es tanto una cuestión de la importancia que el vampiro da a esa área específica, sino una cuestión de posesión. Dichos vampiros suelen interesarse mucho por las preocupaciones rutinarias de sus contactos, abundando en los detalles para distraerse. A veces los Vástagos llevan sus cruzadas mortales más allá de la tumba, pero antes o después se desvanecen esas preocupaciones. La fórmula de la venganza permanece, pero los motivos cambian; antes o después, la caza importa más que el objetivo. No es infrecuente entre los vampiros que logran objetivos que han estado persiguiendo siglos caer en letargo poco después; no hay nada más que les interese.

Por otro lado, están aquellos vampiros de la Camarilla que no están interesados en el trato con los humanos. La Mascarada es una excusa conveniente para evitar la relación con la humanidad salvo para alimentarse. Estos reclusos están más interesados en asuntos vampíricos: investigación taumatúrgica, filosofía vampírica o expresión artística, u otras labores sólo posibles para aquellos que tienen vidas interminables. Como aquellos Vástagos que se relacionan con los humanos, los vampiros que se dedican a los asuntos inmortales tienen una pasión predominante por lo que hacen. Al final, lo que importa no es tanto lo que hace cada Vástago, sino que lo hacen enfáticamente, para evitar vagar a la deriva hacia la locura y la eternidad.
Si te gustó o fue útil no olvides compartir
Sobre las Fuentes
Por favor visita el apartado “referencias” para encontrar las paginas originales de donde fue extraída la información, vampiro.cl es un compendio, nuestro objetivo es recopilar la mayor cantidad de contenido que circula por la web, son muchas personas que día a día traducen y/o comparten conocimientos que verteremos acá, nuestro aporte es clasificar, ordenar y compartir con la comunidad rolera.

0 comentarios:

Publicar un comentario