Karim, Sultán de Samarcanda

Karim, Sultán de Samarcanda. Lleva gobernando desde que depuso al primer sultán de la ciudad, un antiguo llamado Nidal, hace siglos. Unos 600 años después de su Abrazo, Karim conserva un rencor hacia los magos y los conjuradores originado por la muerte de su hermano mortal, en una tormenta de arena alzada por un djinn. Tolera a los hechiceros de su propio bay't sólo cuando regresa a Alamut y no les permite elaborar sus hechizos en Samarcanda. No ah escuchado más que rumores sobre los Usurpadores Tremere y nunca se ha encontrado con uno, pero es inimaginable que mostrase compasión si llegasen a la ciudad dorada. Las relaciones con la mayoría del resto de vampiros suelen ser buenas, siempre que ninguno desafíe su autoridad.

Últimamente a Karin le ha causado problemas su falta de tolerancia para con los hechiceros. Hace sólo un par de años, lideró en persona a una cuadrilla de guerreros Banu Haqim para expulsar a un nido de magos instalados a las afueras de Samarcanda.

Uno de ellos maldijo con su último aliento a Karim, haciéndole que sufriese la insensibilidad que debiera tener al ser un cadáver. El sultán comenzó a perder su sentido del tacto, una maldición que rápidamente pasó de ser una incomodidad a convertirse en un peligro: no puede sentir cuándo le quema el fuego o el sol, por grande que sea el daño que le cause a su carne. Aún no ha podido encontrar un remedio para esta maldición, que puede que pronto le consuma. 

Clan: Banu Haqim (Assamita)
Generación: 8ª
Sire: Tamarind
Naturaleza: Penitente
Conducta: Autócrata
Abrazo: 552 EA
Edad Aparente: Finales de sus 30