Aquí es donde las cosas se hacen diferentes. Todos los Kuei-jin deben elegir un Dharma. Los Catayanos tienen acceso a diferentes Disciplinas, disponen de algunos Trasfondos nuevos y sus Virtudes sufren grandes variaciones.
Los Dharmas ya se han tratado de forma adecuada aquí. Las nuevas Disciplinas se explican más adelante. El personaje recibirá tres puntos para gastar en Disciplinas, pero uno deberá convertirse en un Arte Demoníaco (que dependa del P'o). El Kuei-jin recibirá cinco puntos para gastar en Trasfondos (aunque no se podrá adquirir ni Generación ni Posición) y cuatro puntos para invertir en las Virtudes Chi (cada una de las cuáles comienza con un valor 1). Las Virtudes del Alma comienzan en niveles ya definidos (Hun 1 y P'o 3), pero pueden aumentarse con puntos gratuitos.
Las Virtudes definen para los Kuei-jin buena parte de sus capacidades, así que debes elegirlas cuidadosamente. Los Catayanos tienen dos Virtudes Chi: Yin y Yang, que gobiernan la capacidad para absorber y procesar el Chi. También disponen de dos Virtudes del Alma, Hun y P'o. Hun recuerda a la Conciencia y a la Humanidad, aunque también cuantifica el sentido del honor y la razón del personaje. P'o mide la fuerza de la Bestia.
Respecto a la Fuerza de Voluntad, se emplea igual que entre los demás shen. La puntuación inicial de un Catayano es su Hun. Los vampiros que se especializan en la Disciplina del Alma Interiorizar pueden realizar sorprendentes proezas con su Fuerza de Voluntad.
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