Nacimiento de la Virtud: Sur
En medio del caos y la maldad, el cielo escoge a un individuo digno para recibir su mandato. Esa persona, sea cual sea su situación, debe entregarse al desafío de restaurar el orden y la virtud en la tierra. Cuando el poseedor del mandato tenga éxito en su misión de unificar todo bajo los cielos, comienza una nueva dinastía. Los Wan Kuei reconocen este paso como la llamada distintiva de los suyos alineada hacia el sur.
Crecimiento en Prosperidad: Este
Los sucesores del fundador extienden los triunfos de éste. A escala imperial, los nuevos emperadores llevan a cabo grandes tareas: reformar los impuestos, reparar y mantener en buen estado las obras públicas y rectificar los nombres. En tiempos de maldad, el propio lenguaje se convierte en herramienta de opresión y engaño, y la rectificación de los nombres determina un retorno a la preocupación por la verdad. Este paso requiere de los esfuerzos de los Wan Kuei orientados hacia el este, encargados de y preparados para introducirse en la espiral de la sociedad humana.
Éxito Maduro: Oeste
El fuerte imperio florece. Los bárbaros se acercan para rendir tributo, mientras que los rebeldes huyen acobardados y se rinden ante los guardianes verdaderos del pueblo. Mientras que los pasos anteriores llamaban a la guerra contra la oposición organizada, el pueblo ahora persigue los 10.000 objetivos, unificados en la armonía del buen gobierno y la sociedad moral. Los Wan Kuei orientados hacia el oeste se esfuerzan por preservar la prosperidad de este paso renovando la fidelidad por los espíritus y ancestros. Los espíritus ofrecen consejo sobre aquello que salió mal durante los ciclos pasados, de modo que tal vez en este momento la gente evite esos errores.
Interiorización: Centro
A medida que a la gente se le asegura una buena vida y la dan por hecho, se vuelven hacia su interior y se concentran en sus búsquedas más personales. Si se hace correctamente, la búsqueda de la perfección individual fortalece a la comunidad con ejemplos vivientes de virtud en acción. Si se hace del modo incorrecto, produce narcisismo, falta de disciplina y debilidad dinástica. Este es el paso en el que se hacen valer los Wan Kuei centrados. La iluminación florece sobre los cimientos colocados por otros.
Descubrimiento de la Virtud: Norte
Un sólo líder justo puede hacer volver a la virtud a unas gentes poco voluntariosas. Del mismo modo, un pueblo preocupado puede exigir de sus líderes una fidelidad renovada. Provenga de donde provenga la reforma, ya sea desde arriba o desde abajo, el mandato del cielo vuelve a una dinastía cuando el emperador y su gente buscan de nuevo el Camino. Los Wan Kuei orientados hacia el norte son una parte importante de este paso, ya que están conectados personalmente con el pasado, y poseen una riqueza de conocimientos que los mortales puede obtener. La gente escucha a los que recuerdan la sabiduría de antaño, y reconoce en ella la fundación del futuro así como el éxito del pasado.
Muerte en el Vicio: Sur
El ciclo de recuperación puede tener lugar un número indefinido de veces, pero inevitablemente, todas las instituciones acaban cayendo. Los depredadores amenazan a las gentes desde el interior y el exterior del imperio, y ahora, los defensores no son lo suficientemente numerosos para mantener a salvo a las masas. Al final, la única cura es la muerte de la dinastía. Tiene lugar un período de caos hasta que alguien nuevo obtiene el mandato del cielo. Los Wan Kuei dirigidos hacia el sur vuelven a desempeñar un papel importante: purgan a los malvados, destruyen la corrupción y el engaño y garantizan alguna posibilidad de recompensa personal a los que aún buscan el conocimiento.
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