Educar a los ignorantes es una de la labores de los iluminados. Se necesita una tirada de Carisma + Liderazgo para enseñar a escribir a los acólitos que lo deseen. El personaje no puede tirar más dados para enseñar cuestiones religiosas que su Dharma + Hun o su Inteligencia + Academicismo, lo que sea menor. La dificultad depende del número de estudiantes que tenga el personaje, su voluntad para ser iluminados y cuánto de lo que saben deben aprender antes de poder comenzar a aprender de nuevo. Con un éxito se proporciona alguna comprensión sobre uno mismo y se evita que nadie se quede dormido, con tres, los estudiantes pueden obtener algunos conocimientos genuinos, y con cinco se da una lección magistral, dando vida verdadera a la doctrina.
También son corrientes entre los maestros teólogos los debates sobre escrituras religiosas. Sin embargo, los debates dentro de un Dharma son inusuales. Al considerarse válidos todos los senderos de Dharma ortodoxos, y al haber existido numerosas disputas entre los Dharmas primerizos tras la caída de Meru, hay un legado de tolerancia general entre los numerosos Caminos de Vuelta. Sin embargo, los debates entre sectas y escuelas de pensamiento opuestas dentro de los Dharmas son habituales, y suelen provocar rivalidades encarnizadas. Se necesita una tirada de Astucia + Academicismo para debatir las escrituras sagradas, y ningún personaje puede tirar por más de su Inteligencia + Dharma. Normalmente, no se pueden hacer más de tres tiradas sobre un tema determinado o el debate se vuelve repetitivo.
Uno de los Wan Kuei que intervengan en el debate debe tener de cinco a diez éxitos más que su oponente para poder derrotarle. El número real de éxitos necesarios depende de lo oscuro que fuese el asunto que se debatiese. Cuanto más oscuro, más éxitos hacen falta para iluminarlo de un modo favorable.
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