• Físicos: Fuerza 5 (demoníaca), Destreza 3, Resistencia 5 (inhumana)
• Sociales: Carisma 1, Manipulación 2, Apariencia 1
• Mentales: Percepción 3, Inteligencia 2, Astucia 3
• Talentos: Alerta 3, Atletismo 2, Esquivar 3, Empatía 1,
Pelea 4 (enemigos débiles) Intimidación 4 (vileza), Subterfugio 1
• Técnicas: Armas Cuerpo a Cuerpo 3, Etiqueta 1, Sigilo 3, Supervivencia 2
• Conocimientos: Leyes 1, Ocultismo 1, Política 1, Rituales 1
• Equivalente a Disciplinas: Fortaleza 2, Viento Negro 3
• Trasfondos: Aliados 1, Contactos 1, Influencia 1
• Hun (Gnosis): 1, P'o (Rabia): 6, Yin: 4, Yang: 4, Fuerza de Voluntad: 5
• Niveles de Salud: 0/-1/-1/-2/-2/-5/Incapacitado
• Cita: "¡Vuelve a la fila, saco de mierda!"
• Imagen: no todos en el Yomi pueden ser excitantes y únicos sirvientes de la maldad. Alguno tiene que tomar el papel de la monstruosidad de medio nivel, el horror invasor, el minero que ayuda a construir los rangos y las filas de las legiones del Yomi. Estas estadísticas representan a un perfecto demonio genérico del tipo medio y los Narradores deberían alterarlas respecto al tipo especifico de demonio que vaya a ser representado.
Los espíritus del Yomi tienen todas las formas y tamaños: algunos son genéricos torturadores negros de los condenados con calderos, tridentes afilados y látigos. Otros se aparecen como criaturas bestiales que recuerdan a una mezcla de humano y perro, serpiente, mono, oso, rata... O como cadáveres en recesión en diferentes estados de descomposición. Algunos son más particulares que esto, y toman la forma de balbucientes montones de carne, de lenguas de dos metros de largas, miles de gusanos que construyen la figura de hombres, o una extraña mezcla entre un Fénix, una chicharra y un niño pequeño. Sea cual sea el caso, ninguna de estas criaturas es agradable de apreciar y son aún menos agradables cuando se trata con ellas.
• Posesiones: alguna armadura que puede proporcionar un dado o dos de protección y sustrae un dado de la Destreza del portador, y un arma que puede o no que haga daño agravado.
• Sugerencias de Interpretación: se trata de espíritus sin edad, ni corazón, creados por las fuerzas malignas en tiempos de antaño para que sirvieran a los Reyes Yama. Con el advenimiento de la Tercera Edad, y la caída del Yomi en la degradación espiritual absoluta, algunos de esos seres consiguieron el libre albedrío, aunque la mayoría se convirtieron en un esclavo de su maestro en vez de ser uno de su deber. La mayoría de esas criaturas son inherentemente malvadas, simplemente porque esa maldad inherente hace que se tomen su tarea, dolorosa y sin remuneración, mucho más fácilmente. En un mundo ideal, esa maldad habría sido retraída por acción del orden natural de las cosas, pero el Yomi no se trata de un mundo ideal. Desmelénate todo lo que puedas porque no tienes elección.
• Notas para el Narrador: esas criaturas son lo que quieres que sean en cada momento, desde detallados y sádicos recordatorios del pasado torturado de un Kuei-jin a efectivos para ser enviados a los lugares de importantes batallas en el autobús de la escuela para ser cortados como bolsas gimientes y aullantes de húmeda harina.
Los vigilantes tienden a ser versiones más poderosas de los servidores básicos.
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