La no vida de un Cainita está dominada por dos cuerpos celestiales: el sol, al que más teme y odia; y la luna, la única fuente de luz segura. Un Lhiannan puede decorar su cuerpo con sigilos arcanos de sendas órbitas para obtener beneficios; el espíritu de la luna, siempre compañero de los vampiros, le bendice a través de su fase actual, mientras que la órbita solar desvía una porción de su ardiente curso. Los hombres lobo de quienes se dice que son devotos de la luna, se enfurecerán en cuanto vislumbren un emblema lunar pintado sobre el cuerpo de un vampiro.
Sistema: El jugador invierte tres puntos de sangre. El Lhiannan inscribe el sigilo deseado en cualquier lugar expuesto. El personaje puede escribir ambos símbolos, pero cada uno de ellos requiere el mismo gasto de sangre y quince minutos para completar los trazos. Asimismo, podrá inscribir los sigilos sobre un sujeto voluntario.
•El emblema solar protege al vampiro de los peores efectos del fuego y la luz solar. Mientras el símbolo permanezca inalterado en el cuerpo del personaje, el jugador podrá realizar una tirada de resistencia (dificultad 8) cuando se le exponga al fuego o a la luz. Si la tirada resulta efectiva, el daño se considera letal y el jugador podrá absorberlo de forma normal. La tirada debe hacerse cada vez que el personaje se enfrente a este tipo de daño.
•El emblema lunar suma un dado a las dificultades de autocontrol/instinto para evitar el frenesí (pero no en las tiradas de coraje para eludir el Rötschreck). Los demás efectos de éste sigilo dependen de la fase lunar:
Luna Nueva: Suma un dado a las reservas de destreza y sigilo.
Luna Creciente: Suma un dado a las reservas de astucia y ocultismo.
Luna Menguante: Suma un dado a las reservas de percepción y subterfugio.
Luna Gibosa: Suma un dado a las reservas de carisma y expresión.
Luna Llena: Suma un dado a las reservas de fuerza y pelea.
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