Infiltrada

Trasfondo: Ésta no ha sido una de tus mejores décadas. Habías trabajado mucho para probarte a ti misma que eras una Verdadera Sabbat, incluso adoptando una Senda de Iluminación bajo la tutela de tu prestigioso Obispo. Pensabas sinceramente que te habías deshecho de los últimos jirones de tu gimiente Humanidad hasta… aquella noche, cuando intentaste llegar demasiado lejos, demasiado rápido, y tu mente se resquebrajó por la presión. Comenzaron a perseguirte angustiosas pesadillas diurnas que todavía persisten en las que se combinan tus seres queridos de tu vida mortal y los crímenes de tu existencia como no-muerta de las formas más horribles posibles. Cada vez que acercabas el cáliz de la Vaulderie a tus labios era como si tragases una poción de condenación de una bruja. La Muy Seria Manera de Reconsiderar las Cosas a la que te condujeron esas experiencias acabó por convencerte de desertar y unirte a los Anarquistas; después de todo, sus métodos de asegurar la igualdad entre Cainitas no se basan en el fanatismo y el afecto impuesto de forma sobrenatural. Sin embargo, apenas te aceptaron en sus filas, insistieron en que regresases, esta vez para espiar a tus antiguos correligionarios. Es obvio que hay alguna operación de espionaje a gran escala en marcha y tu instructor te asegura que, si cumples tu parte, te sacarán de una pieza de allí y te recompensarán no sólo con la membresía de pleno derecho, sino con una medalla (palabrita de Caín). Sin embargo, en su entusiasmo por haber encontrado una agente cuyo evidente linaje Lasombra la hace casi inmune a las sospechas, olvidaron una cosa, y es el absoluto infierno por el que pasas al someterte a la Vaulderie con una manada que no quieres, al participar en los sangrientos Ritae y al pronunciar las letanías del Sermón. Es verdad que eres una excelente mentirosa, pero en este momento tu mente y tu alma están en un estado terriblemente frágil, demasiado como para estar haciendo algo tan osado en este momento. Si no consigues encontrar a alguien que te devuelva al camino de la Humanidad, pronto caerás en el Wassail sin poder evitarlo.

Apariencia: Una mujer de pelo oscuro con manos elegantes cuyo origen étnico es difícil de localizar (sus padres eran de Georgia, el país, no el Estado de EE.UU.). En los últimos tiempos sus sombras están especialmente inquietas y suelen rozar a otras personas o amenazarlas desde el rabillo del ojo Viste con ropa oscura y sencilla pero cara: jerséis, vaqueros, botas.

Pautas de Interpretación: Tu comportamiento es nervioso y vehemente y a veces tienes tics: repiquetear con los dedos, tirarte del pelo, morderte los labios y cosas así, sobre todo cuando un estallido de violencia es inminente. Trata de averiguar qué está tramando todo el mundo, pero sé paciente y espera a que la conversación comience de forma natural. Ahora mismo, las raras ocasiones en las que puedes pasar el rato con otros Anarquistas son lo único que te permite mantener la cordura.

Clan: Lasombra.
Naturaleza: Penitente.
Conducta: Sociópata.
Generación: 13ª.
Físicos: Fuerza 2, Destreza 3, Resistencia 3.
Sociales: Carisma 2, Manipulación 3, Apariencia 2.
Mentales: Percepción 3, Inteligencia 4, Astucia 3.
Talentos: Alerta 2, Atletismo 1, Callejeo 1, Expresión 1, Intimidación 2, Pelea 2, Subterfugio 3.
Técnicas: Armas de Fuego 1, Interpretación 1, Pelea con Armas 1, Sigilo 2.
Conocimientos: Academicismo 1, Informática 1, Investigación 3, Ocultismo 3, Política 2.
Disciplinas: Dominación 2, Obtenebración 2, Potencia 1.
Trasfondos: Aliados 2, Contactos 1, Identidad Alternativa 2, Recursos 3, Rituales 1.
Virtudes: Convicción 1, Instinto 2, Coraje 5.
Moralidad: Senda del Poder y la Voz Interior 3.
Fuerza de Voluntad: 7.