Cita: Vuestra Sociedad no es sino otra de los hijos de
la Ramera de Babilonia. Aunque servís a una buena causa, en definitiva están tan corrompidos como el resto de su Iglesia.
Preludio: La Biblia fue el primer libro que leíste. En realidad, Padre y Madre
os la leían a ti y a tu hermano cuando
erais pequeños. Allí donde oigas la
Biblia del rey Jaime leída en voz
alta, siempre recuerdas, aunque
brevemente aquellos agradables y
felices días con tu familia.
Pero al crecer, sin embargo,
viste cómo tu paraíso empezaba
a desmoronarse. Primero Padre
dejó a su familia por otra mujer... una furcia, sin duda, pues
nadie más le hubiese seducido
para apartarle de Madre. Después tu hermano empezó a meterse en problemas con las autoridades por consumo de drogas.
Pero tu fe se mantuvo fuerte,
perseverando a pesar de todas
las penalidades. Estudiabas la
Biblia constantemente, y tu conocimiento superaba al de los
reverendos y ministros a los
que oías predicar.
Tu verdadera prueba de
fe llegó en tu vigésimo cumpleaños, poco después de la
muerte de tu hermano por
sobredosis. A altas horas de la
noche, mientras te preguntabas
por qué Dios te estaba probando
así, viste la sombra espectral de tu
hermano arrastrándose por el suelo del dormitorio; llorando silenciosamente, con una
mirada de terror en su rostro fantasmagórico, parecía
estar pidiéndote ayuda. Aquello debía ser un acto del
Demonio con la intención de atormentarte. Pero tu
resolución era firme, y tu deber estaba claro. Con la
simple fuerza de tu fe conseguiste expulsar al fantasma.
Pronto empezaste a oír de otros casos
parecidos (aparentemente, cuando te
ocurre algo así , tienes noticias de otros
encuentros similares) y te convertiste
en una especie de experto en lo oculto
y en cómo enfrentarse a ello. Estos conocimientos te llevaron a relacionarte
con la Sociedad de Leopoldo. Aunque aborreces los adornos católicos
de la Inquisición,
decidiré trabajar
con ella por un tiempo
para aprender cuanto pudieses.
Concepto: Dios permitió al Diablo que te atormentase con la visión
de tu hermano muerto sólo para ponerte en el camino que sigues ahora.
Eliminarás las tinieblas del mundo
con la luz de la fe cristiana, ardiendo brillante en la noche. No eres un
Inquisidor, pues la Iglesia Católica
está tan obviamente equivocada
que no puedes soportar unirte a
una sociedad que apesta a idolatría
y aderezos papistas. Sin embargo, te
asocias a ella para conseguir todo
lo que puedas de esta relación.
Sugerencias de interpretación: Cita la Biblia con frecuencia. No dejes que nada cambie tu
opinión sobre la infalibilidad de la
Biblia como la Palabra de Dios.
Equipo: Biblia, sombrero oscuro de ala ancha, sobretodo oscuro, traje oscuro.
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