El primer Emperador de China era un hijo de los Qin ceñudo y de barba poblada, llamado Shihuangdi. Tuvo la suerte de ascendente al poder en un momento en el que los reinos colindantes a Qin se hallaban gravemente debilitados. En los 20 años antes de que Shihuangdi se convirtiese en emperador, hubo cuatro hambrunas y un brote de peste en ellos. Su ascensión se consideró una señal divina. Como Rey de los Qin, Shihuangdi envió a sus ejércitos a conquistar a sus vecinos y rivales. A medida que estos conquistaban los reinos colindantes, oprimían a sus nuevos súbditos. Asesinaron a todos los varones de pueblos enteros para asegurarse de que no se llevase a cabo ninguna rebelión, y destruyeron las fortificaciones que podrían usarse para defenderse contra ellos en caso de insurrección. Finalmente, más de 20 años después de la coronación de Shihuangdi, este conquistó a su último rival y se proclamó el Emperador de los Qin.
Qin Shihuangdi siguió la doctrina legalista, que afirma que para que el estado funcione correctamente, se debe aplicar la ley escrita con precisión e imparcialidad. Cualquier desviación de este texto es una desviación de la voluntad del rey, y tal cosa es impensable. Shihuangdi puso en práctica la ley con insólita rigidez, asesinando a la antigua aristocracia para eliminar los privilegios de nacimiento, reclutando a los trabajadores para proyectos estatales e imponiendo la pena de muerte como castigo a muchos delitos insignificantes. Mientras tanto, los ejércitos de Qin seguían extendiendo el imperio. Además de la victoria militar y el dogma legalista, el régimen de Shihuangdi mejoró la estructura de la nación, creando un sistema de carreteras que se extendían desde un punto a otro, unificando los pesos y las medidas, así como la moneda y el sistema de escritura. Además, construyó la Gran Muralla en el extremo norte del estado. Esta muralla cumplía dos propósitos: proteger al imperio de los bárbaros del norte y hacer casi imposible el que los campesinos escapasen hacia el norte y salieran del alcance de dicho imperio.
En el octavo año del imperio, Shihuangdi comenzó a suprimir sistemáticamente las corrientes de pensamiento inaceptables. Un erudito sugirió al cruel emperador que debería seguir los dictados de Confucio con más celo. No sólo se ignoró el consejo de este erudito, no sólo se le castigó, no sólo se quemaron todas las obras clásica que no fuesen de los Qin, sino que además se implantó la pena de muerte como castigo por discutir sobre obras clásicas en una conversación o referirse a ellas al mentar la política imperial. Para sorpresa de pocos en la comunidad sobrenatural, cierto número de eruditos e historiadores se unieron a las filas de los Wan Kuei durante el relativamente corto reinado de Shihuangdi. Cuando este cayó victima de la edad, se dice que su palacio fúnebre fue realmente magnífico, que cubría acres enteros y albergaba reproducciones en terracota de miles de sus guerreros más leales. Su carro y gran parte de su fortuna se enterraron junto con él. La construcción de este palacio había comenzado cuando ascendió al trono de Qin, unos 36 años antes.
• De los comentario de Li Citian: Hace poco he oído relatos que afirman que las plagas y pestes no fueron accidentales. AL parecer, un joven Wan Kuei coaccionó a un señor feudal de la zona para que acumulara su comida. Esto hizo que sus vecinos le imitaran, y pronto esta costumbre de acumular comida provocó una hambruna en el norte y en el este. Las Gentes Feroces afirman que la pestilencia fue el resultado de la destrucción de un gran demonio por su parte.
• De los comentarios de Juang Guangyao: Glosar una era tan importante de nuestra historia es casi un crimen. La Quema de los Libros, como debería denominarse correctamente este período, fue un golpe traumático para los Wan Kuei, no una simple nota histórica. La capital imperial, la misma sede de la Corte del Emperador Amarillo, se convirtió en el centro de una purga de todas las cosas contrarias a la ortodoxia Qin. Pueden imaginar cómo reaccionó un estricto legalista como Shihuangdi a la evidencia de sus ancestros no muertos y las cortes que no se humillaban ante él. Durante los 15 años de su imperio, la ciudad se vació de Muertos Famélicos. Sin embargo, los textos mortales no fueron los únicos en alimentar las hogueras. Los antiguos textos Kaja transcritos en pergaminos, así como las tabletas originales desaparecieron del mismo modo. Muchos de nuestros eruditos huyeron con lo que pudieron a las cuevas de Longmen y Thien, repartidas en muchos lugares distintos para esconder sus tesoros de la policía secreta. ¿Cuánta de la sabiduría de Xue y la gloria de Meru perdimos a causa de ese emperador, Lu Feng? ¿Cuánto calculas que se puede glosar de esto?
Oh, ya sé que los cortesanos y mandarines de Changán y Linan intentaron reducir al mínimo el sufrimiento de aquellos días durante aquellas noches. El que un mortal destruya sus cortes y santuarios va contra su imagen eterna e infalible. Si se les presiona para que comenten este tema, afirmarán que los Shih fueron responsables, o las astutas Gentes Feroces en busca de venganza, u otros shen. Estoy seguro de que algunos de estos enemigos se aprovecharon de nuestra debilidad, pero fue el vulgar mortal Qin Shihuangdi el que nos destruyó. En las noches de Shang, hubiésemos reinado como dioses. Después del tiempo de los Qin, supimos que debíamos reinar como dioses, aunque sólo fuese para seguir de cerca los planes de los gobernantes mortales. Hacia el final del reinado de Qin Shihuangdi los Wan Kuei retornaron a la capital. El emperador estaba desesperado por dar con los secretos de la inmortalidad, y nosotros nos introdujimos cautelosamente junto con la cabalgata de eruditos y místicos. Yo me alegro de que los varios alquimistas a los que llamó fracasaran de forma tan espectacular al intentar mantenerle con vida. Puede que ahora reine en la tierra de los muertos, pero, por lo que a mi respecta, está invitado a hacerlo.
Qin Shihuangdi en el Otro Mundo
Algunos Wan Kuei Yin han viajado al palacio de Shihuangdi en la Esfera Yin de las Fuentes Amarillas en más de una ocasión. El antiguo Primer Emperador se ha convertido en el Emperador de Jade de los muertos. Algunos dicen que esta Esfera se ha acercado demasiado al mundo Yomi como para ser considerada una verdadera Esfera Yin, pero estas cosas son muy duras y rápidas. La Esfera de Yu Huang, nombre que el soberano prefiere ahora, no es agradable para sus habitantes ahora muertos, y representa un reflejo eterno del trabajo del emperador como gobernador mortal.
Los Wan Kuei que viajan a las Fuentes Amarillas con el permiso del Emperador Muerto, se encuentran con un anfitrión cortés, si bien cauteloso para con los que se ganan su respeto. Estará encantado de habar sobre historia, sobre los peligroso y recompensas del poder y los sucesos de la vida eterna. Los Wan Kuei incautos que viajan a las Fuentes Amarillas sin permiso, se quedan allí para siempre. No se suele hablar sobre la suerte que corren, pero se sabe que Yu Huang cree estar al nivel de los Reyes Yama, y somete a sus enemigos a destinos propios del infierno.
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