Los Reinos del Espíritu

La mayor ventaja de por sí que los Kuei-jin tienen sobre los Vástagos es su habilidad para entrar en los reinos del espíritu. Con este poder, los Kuei-jin pueden desvanecerse sin dejar huella cuando una manada de Cainitas está sobre sus talones o transportarse a sí mismos sobre grandes distancias sin pasar por territorio enemigo. No es tan útil para el ataque, dado que pocos son capaces de deslizarse fuera de las Tierras del Espejo siempre que lo deseen, pero la movilidad sigue siendo una ve taja vital en esta guerra.

La mayoría de los guerreros del Gran Salto al Exterior usan las réplicas de jade producidas por el Rito de la Instilación del Jade para visitar los reinos del espíritu. Cualquiera puede utilizarlas, y son un método de viaje relativamente seguro. Lamentablemente, no hay muchos que conozcan este rito en lo tocante a suministrar una producción infinita de réplicas, así que su empleo se reserva para situaciones de emergencia. Los mandarines de la invasión estarían encantados de poder dejar que sus guerreros se ocultaran en el mundo de los espíritus durante el día, para evitar cualquier posibilidad de ser descubiertos por los siervos de los Cainitas, pero es un lujo que no pueden permitirse.

Un puñado de invasores ha dominado los Pranas Yin y Yang hasta tal punto que pueden entrar en las Tierras del Espejo a voluntad, y salir en el lugar de su elección. Sin embargo, son en verdad muy pocos los que han adquirido la Disciplina, tanto física como espiritual, exigida para alcanzar el Semblante de la Reina Escarlata o el Semblante del Dragón de Ébano. Estos pocos son los asesinos de élite del Gran Salto al Exterior, cuyo blanco son líderes Vástagos. Por último, algunos wu temerarios entran al reino de los espíritus en los Didos de Dragón occidentales. Se trata de una de las tácticas menos útiles en el Gran Salto al Exterior, pues los Garou son ferozmente reacios a tolerar visitantes corrompidos por el Wyrm en sus túmulos. Los primeros de los escasos wu que usan esta táctica en una región determinada por lo común consiguen pasar a través sin ser muertos, pero después de aquello los Garou están sobre aviso.

Esta creciente paranoia ha perjudicado a los Vástagos más que a los Kuei-jin, en último término, pues los Garou no se molestan en apreciar las sutiles diferencias entre los dos shen. Una criatura no viva del Wyrm es una criatura no viva del Wyrm sin importar de dónde venga. Los ataques Kuei-jin tienden a conducir a muchos anarquistas fuera de su territorio habitual, dentro de zonas reclamadas por los Garou, y esos anarquistas sufren las consecuencias de las acciones Kuei-jin. Los feudos francos Kithain (que son también Nidos de Dragón) son más fáciles de atacar, pero sigue sin ser algo del todo seguro. En Los Ángeles, el Duque Jayson de Hollywood ha estado investigando desesperadamente a los Kuei-jin y ahora sabe cómo usar magia feérica para afectarles. Los resultados, unidos al poder troll y al espionaje sluagh, tienen potencial para ser asombrosamente efectivos, y Jayson comparte sin escrúpulos sus técnicas con sus compañeros nobles de Concordia.

Zeng Yuling hizo acopio de sus fuerzas, tomando los tres hálitos de preparación. Estaba bastante seguro de que el ser ante él se contaba entre los más importantes de los Kin-jin corrompidos por el demonio. Los espíritus de sus ancestros estaban con él. Dejó partir a su naturaleza Yang de inmediato, y cuando la Reina Escarlata le abandonó, fue uno con el mundo material.

En el mismo momento, permitió que su Chi Yang lo llevara, retorciendo su cuerpo con las cabriolas de su danza marcial. Los olores de la oficina del almacén se alejaron de su percepción, el hedor del cuerpo a cuerpo ya no lo afectaba. Su Chi fluyó fuera de él para darla total control y conciencia mientras giraba con frenética precisión. Un instante más y su pie se cruzaría con el cuello de él en un arco perfecto.

No estaba allí. Se oyó un disparo fuera, el sonido alargándose durante una eternidad: la única luz encendida se apagó. La oscuridad lo inundó todo, dejándole sólo el nada confortable conocimiento de que su oponente se movía con la misma infalible gracia que él.

Entonces, se oyó una risa ahogada, obscena y sombría -Jack es demasiado viejo para trucos estúpidos; ¿crees que no me he enfrentado a un lobo antes?- Las palabras no tenían ningún sentido, pero las que siguieron sí, -Por desgracia para ti, puedo ver en la oscuridad.

Yuling no iba a desperdiciar su aliento sobre un akuma occidental, no importa lo rápido que fuese. Podía ser tan rápido como él, este Jack, pero no sería tan hábil. No importaba. Con toda su habilidad y el poder de su Chi guiando sus movimientos, se lanzó a la lucha.

En menos de un minuto, descubrió que podía ser igual de hábil, y no pasó mucho más tiempo antes de averiguar que su fuerza era la de las montañas. Con un brazo roto, la mitad de su kata era inútil; cuando el cuchillo cortó los tendones de su pierna, la victoria del otro fue completa.

Murió oyéndole reír. Era un desalmado, sin duda.